lunes, 30 de junio de 2008

CRIMINALIZACIÓN DE LOS JÓVENES

30 de junio de 2008


Fernando Belaunzarán


Felipe Calderón escupió al cielo cuando expresó la insidia de que no había que criminalizar a los jóvenes, pues los gobiernos panistas son especialmente represores con ese segmento de la población. Pero en el contexto de la tragedia del News Divine, evidentemente provocada por la impericia de la policía capitalina en un operativo vergonzoso para un gobierno de izquierda –y lo es no sólo por sus lamentables resultados-, fue un certero dardo, una verdad incómoda restregada en la cara del perredismo en su principal bastión. Que el PAN persiga a los jóvenes es tan nefasto como natural; al PRI le es genético, parte de su identidad forjada en las décadas de su dominio; pero para el PRD eso le resulta una incongruencia monumental, la negación franca de su historia, tradición, raíces, discurso, razón de ser. Al lado del drama por la tragedia expresada en vidas humanas estúpidamente apagadas se encuentra otro que aunque no tiene la honda pena de la pérdida irremediable de proyectos y futuros que quedaron truncos por culpa de quienes tenían la obligación de protegerlos sí llega a ser traumático y deprimente. En este último caso, la indignación, el dolor, la molestia no devienen por lo que aconteció mal, por los diecinueves errores cometidos por los mandos policiacos, sino por la idea misma de detener y llevar coactivamente ante la justicia a jóvenes que son sorprendidos “en flagrancia” divirtiéndose –¡qué horror!- en un establecimiento cuyas faltas son responsabilidad del dueño y, en todo caso, de las autoridades que se corrompieron para otorgar permisos indebidos. Ese otro drama es por caer en la cuenta de que también hay responsabilidad por cobijar incongruencias.

¿Cuál es la diferencia entre el infausto operativo multicomentado y las tristemente célebres razias que se aplicaban hace más de una década en el Distrito Federal? La única respuesta que se me ocurre es que ahora no se hacen por reprimir y apuntalar el principio de autoridad mediante la reivindicación del derecho a la arbitrariedad del poder omnímodo que había en los tiempos del priato sino para, como lo señalamos en el artículo anterior, dar golpes mediáticos de rentabilidad política. Es lastimoso que “la mano dura” sea bien recibida y valorada en amplios sectores de la población con independencia de que eso se explique por la histeria generada ante la creciente inseguridad, violencia desmedida del crimen organizado e impunidad endémica. De ahí la tentación de algunos profesionales de la seguridad para que sus carreras políticas se cimienten en desplantes autoritarios y se eleven pasando por encima de una multitud de cuerpos de inocentes exhibidos como delincuentes en horario estelar.

No encuentro motivo para llevar por la fuerza a instancias judiciales a jóvenes que se comportan como tales en un antro que no por su culpa se encuentra fuera de la ley. Es más, el dueño les debería reintegrar lo que pagaron por entrar a un lugar que tiene que suspender intempestivamente su programación. Pero en el caso News Divine no sólo se llevaron a los jóvenes. Según se documentó, existieron actos de brutalidad policiaca, tardaron más de cinco horas los camiones en llegar a la agencia ministerial con los detenidos -mismos que fueron marcados y fichados cual delincuentes- y a una treintena de jovencitas se les obligó a desvestirse para ser fotografiadas. Más allá de los excesos evidentes, más allá de la lucha política que no perdona nada ni a nadie, más allá de cálculos futuristas y jaloneos sucesorios, más allá incluso de la expiación oficial mediante el incontinente rodamiento de cabezas, el lamentable acontecimiento obliga al PRD y a sus gobiernos a reflexionar no sólo sobre lo ocurrido sino también sobre lo que está detrás, sobre la concepción que lleva a ordenar operativos para detener y exhibir a jóvenes de barrios populares.

Se debe trascender la crítica circunscrita a una operación malograda. Antes de ésta hubo cuatro acciones similares catalogadas como “exitosas”, en las que no hubo muertos, pero sí cientos de jóvenes presentados ante instancias judiciales y medios de comunicación y en las que también existieron denuncias por abusos policiacos. El problema existencial para el PRD es que sufrió y combatió operativos muy similares cuando era oposición en el DF y, por si eso fuera poco, dos de sus antecedentes de mayor peso simbólico son las represiones de 1968 y 1971. Por supuesto que ambos acontecimientos son muy distintos a lo que ocurrió recientemente en la Delegación Gustavo A. Madero, pero el repudio al abuso policiaco y la demanda de respeto a los jóvenes y sus expresiones son elementos constitutivos de su más profunda identidad.

Ahora bien, resultaría sesgado e injusto calificar la política hacia los jóvenes del Gobierno del Distrito Federal dirigida por los excesos cometidos en los operativos. Eso sería obviar las casi doscientas mil becas a los estudiantes del bachillerato y el funcionamiento de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México –la única institución superior pública creada en más de veinte años en el país- en tiempos de una crisis educativa que parece catástrofe. Y también los sería con otras políticas exitosas como los paseos ciclistas y los eventos culturales, algunos de ellos masivos, promovidos con imaginación y audacia. Es verdad que los aciertos no exoneran las fallas ni sirven como excusas para no corregir, pero ayudan a tener opiniones equilibradas. Siempre se debe procurar ver las cosas en su justa dimensión.

Dicho lo anterior, no hay espacio para la autocomplacencia en el PRD. A diferencia de muchos países, la mayoría de los jóvenes no votaron por la izquierda en las últimas elecciones. El deseo de cambio y el ímpetu para llevarlo a cabo que caracteriza a buena parte de la juventud no fueron catalizados por el candidato de esa tendencia, tal y como se esperaba, y sería absurdo echarle la culpa a la juventud cuando el perredismo tiene un relevo generacional a cuentagotas, su programa no está adecuado a la versatilidad y dinamismo de las necesidades juveniles actuales vinculadas a las nuevas tecnologías y a la revolución de las comunicaciones, la acción afirmativa no es garantía de incidencia sectorial, faltan políticas públicas eficaces y atractivas en sus gobiernos, comparte el descrédito de la llamada “clase política” y los jóvenes no están entre sus preocupaciones primordiales. Es incomprensible que el excandidato presidencial perredista no haya asistido a una sola universidad durante la campaña, durante el movimiento postelectoral o durante las jornadas en defensa del petróleo. Tampoco lo es que el director del Instituto de la Juventud del DF sea un heptogenareo.

Se debe valorar la oportuna reacción de Marcelo Ebrard para iniciar las investigaciones de lo ocurrido en el News Divine, combatir la impunidad y abrir las pesquisas a la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal. Esperemos que haya esa misma disposición para revisar la naturaleza de las acciones de la policía en espacios juveniles y corrija actuando en consecuencia con la historia, el programa y los principios del PRD, lo cual no necesariamente implica despedir o renunciar a nadie. Lo fundamental es lo siguiente: ni un muerto más, ni una razia más.


De paso…


Allende y el Che. Dos íconos cumplen cien y ochenta años de su natalicio. Salvador Allende y Ernesto Guevara son el pretexto ideal para recordar la historia y pensar sobre la izquierda latinoamericana. Eso es precisamente lo que quiero hacer en el siguiente artículo si es que no nos alcanza otra tragedia… Por lo pronto, el grupo chileno Quilapayú tuvo una emotiva visita al CEN del PRD y las canciones de protesta brotaron y se escuchó con fuerza la consigna de la Unidad Popular: “el pueblo unido jamás será vencido”… El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación ratificó la validez del Consejo Nacional que nombró a Guadalupe Acosta Naranjo y a Marta Dalia Gastelum como Presidente y Secretaria General respectivamente, con lo que se asegura la estabilidad institucional durante el interregno de la calificación…Se espera que en breve la Comisión Nacional de Garantías emita, por fin, su veredicto sobre la elección del 16 de marzo y deseamos que no haya impunidad para los defraudadores ni que el infame veto termine por imponerse… Mi solidaridad con Denise Dresser por el injusto veto del que fue objeto. Sin duda, su voz hubiera resonado con fuerza y tino en el Senado. Está visto que a algunos que se dicen demócratas les incomoda la independencia… Lo dicho y predicho: España campeón merecido de la Eurocopa 2008.

lunes, 23 de junio de 2008

TRAGEDIA EN EL DF

23 de junio de 2008


Fernando Belaunzarán


Las muertes siempre se lamentan, más aún las que pudieron evitarse. De estas últimas, hay algunas que se les puede catalogar como muertes estúpidas, que no debieron haber ocurrido, que son producto de errores no atribuibles a las víctimas. En tal caso lo que surge es indignación y, por supuesto, un sentimiento de justicia que exige satisfacciones. Si además resulta que la autoridad, cualquiera que ésta sea, por acción o por omisión, en mayor o menor medida, tiene alguna responsabilidad de lo acontecido, entonces la combinación con la política es inevitable y el cocktail resulta explosivo -no se diga en los tiempos de encono, enrarecimiento y polarización que hoy vive el país.

Los terribles hechos del viernes pasado en el New’s Divine, antro ubicado en la Delegación Gustavo A. Madero, que dejaron un saldo de doce personas muertas se encuentran en esa difícil situación y, por lo mismo, vemos que la lógica de la lucha política actual impone en todos los frentes la frenética necesidad de hallar culpables funcionales o señalar chivos expiatorios para acomodar las cosas de acuerdo al cálculo faccioso antes que promover y generar condiciones adecuadas para una investigación seria y ecuánime. Se está privilegiando la ruta de saldar cuentas o de buscar réditos electorales o sucesorios por sobre la posibilidad de reflexionar serenamente sobre el fondo del problema. Las condenas a diestra y siniestra no favorecen lo que debiera ser la prioridad: analizar, entender, aprender, corregir para evitar que vuelva a suceder una tragedia como ésta en el futuro sin que ello signifique dejar de sancionar a quien se lo merezca.

Lástima que ni en las tragedias la clase política mexicana tenga la altura de miras y la generosidad para evitar caer en la tentación de lucrar con el dolor y el drama humanos y sólo le interese el rédito o el control de daños de cara a los próximos comicios. Atenernos sólo al espectáculo morboso de ver rodar cabezas para calmar conciencias legítimamente indignadas sería renunciar a la posibilidad de trascender la superficie y comprender que estamos ante la consecuencia de una perversión del servicio público que no es privativa de una administración ni de un partido sino que recorre transversalmente a todo el sistema político. El signo de los tiempos es gobernar para los medios, pues ahí está el elixir de la popularidad y la puerta para ascender a la cúspide. La máxima que se repite en todas los palacios de gobierno es la siguiente: “si no sale en la televisión entonces no existió”.

Es evidente que el operativo mal diseñado y peor implementado no perseguía en primera instancia la clausura del antro, que pudo hacerse mucho antes de que estuviera lleno el lugar, sino detener a cientos de jóvenes, exhibirlos y lograr el horario estelar para que se muestre a una policía que actúa para acabar con los lugares “de vicio y perdición” en abono a la tranquilidad y simpatía de “las buenas conciencias” y de miles y miles de padres de familia que se preocupan por la forma en que se divierten sus hijos y que de seguro mostrarán su peso en las próximas encuestas. Según se documentó había quince policías infiltrados dentro del local informando y esperando la irrupción de sus compañeros. Lo que se quería era una acción espectacular pensada para las audiencias en lugar de la discreta aplicación de la ley que es eficaz, pero no atrae reflectores.

Lo anterior, por supuesto, no exime de su responsabilidad a los dueños del antro que permitieron el ingreso a menores de edad, les sirvieron bebidas alcohólicas y corrompieron a autoridades para obtener permisos sin cumplir con condiciones mínimas de protección civil. En la Ciudad de México hay muchos de estos establecimientos que operan por la connivencia de funcionarios delegacionales que otorgan dichos permisos o de los jueces que conceden amparos para que sigan trabajando a pesar de los riesgos que eso implica para clientes y empleados. Pero insisto, lo de fondo no son los fatales errores que trajeron la tragedia a familias que no debían sufrirla sino que el peso del raiting seduce a todos los gobiernos de derecha, centro e izquierda y subordina sus políticas y para muestra el botón de los ostentosos operativos contra el narco de escasos resultados. Sería absurdo plantear que la comunicación social de los gobiernos no se planteara tener el mayor impacto mediático posible con sus acciones, pero sí pensar en que eso no sea a costa de los derechos, libertades y seguridades de los ciudadanos. Decía Kant que uno de los imperativos de una ética de pretensiones universales debía ser considerar a los hombres como fines en sí mismos y no sólo como medios. Sobre ello deberíamos reflexionar sin afilar machetes ni pasar facturas.

Sobre los hechos concretos del viernes pasado se debe reconocer que el Gobierno del Distrito Federal reaccionó rápido y bien. En lugar de negar la realidad y, como suele ocurrir en estos casos, culpar de todo a los otros e inclusive a las víctimas, no eludió el problema ni a las posibles responsabilidades a las que haya incurrido. En un elocuente comunicado dado a conocer por el mismo Marcelo Ebrard un día después de lo ocurrido se demuestra que existe conciencia y sensibilidad del gobierno acerca de la gravedad de los hechos, así como de la necesidad de esclarecerlos fehacientemente y no permitir la impunidad. Tras señalar que “la ciudad está de luto” y manifestar “la consternación, dolor e indignación” que embargan a sus habitantes por los “éticamente inaceptables” hechos, el jefe de Gobierno asume la existencia de “errores graves” en el operativo y anuncia una “investigación transparente, imparcial y justa” para deslindar responsabilidades no sólo de los dueños y empleados del lugar sino también de los servidores públicos de la policía y de la Delegación Gustavo A. Madero. Como prenda acierta en abrir toda la investigación a la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal presidida por un hombre honorable y profesional, Emilio Álvarez Icaza. Por su parte, el jefe Delegacional, Francisco Chíguil, removió a cuatro altos funcionarios para facilitar las indagatorias, mismas que esperemos no sean contaminadas por la pugna sucesoria en esa demarcación que, por desgracia, no es ajena al problema. Las intenciones y el procedimiento han sido establecidos adecuadamente; ahora sólo falta que las investigaciones arrojen resultados a la brevedad y que éstos sean convincentes. Que así sea.


De paso…

Legítimo. El problema no es la ley sino su aplicación abusiva. El Consejo General del IFE está usando sus nuevas herramientas otorgadas por la nueva legislación electoral sin mesura y ha sancionado a partidos por ejercer su libertad de expresión. Ni el spot del PAN contra las tomas de tribuna son guerra sucia ni llamar presidente legítimo a Andrés Manuel López Obrador atenta contra la institución presidencial. No me parece que la mejor forma de ganar autoridad sea excediéndose con ambos bandos. Además, seguramente el Tribunal Electoral va a revocar las sanciones y AMLO está encantado de ser noticia por una absurda prohibición que le permite presentarse como perseguido y atacar la credibilidad del órgano electoral. La convocatoria al mitin del 29 de junio le agradece al IFE los favores recibidos… El PRD en el DF no debe actuar más como si tuviera a la capital del país escriturada a su nombre. La reciente encuesta dada a conocer por El Universal (19 de junio de 2008) es un fuerte llamado de atención, no sólo porque en la Ciudad de México aparece Enrique Peña Nieto aventajando a Marcelo Ebrard y a López Obrador sino también porque ha bajado la identificación ciudadana con ese partido en 10 puntos desde la elección presidencial. Si la desobediencia civil estalla en la ciudad con motivo de la reforma energética por supuesto que también tendría costos electorales. Aunque sea por mantener su bastión, el PRD está obligado a la sensatez y la unidad; sin embargo… La franquicia más ganadora del basketbol de los Estados Unidos, los Celtics de Boston, se alzaron con su decimoséptimo título, rompiendo una racha de más de veinte años de ayuno. En las finales vencieron a sus históricos rivales, los Lakers de Los Ángeles, para coronarse merecidamente… Y en la Eurocopa me inclino por la Furia Española que ha jugado muy bien…

miércoles, 18 de junio de 2008

EL VALOR DE LA CONSULTA

19 de junio de 2008



Fernando Belaunzarán


Como hasta el momento no ha prevalecido la madurez ni la visión de Estado para legislar sobre el plebiscito y el referéndum a nivel federal y abrir con ello una salida institucional a la tan anunciada confrontación por la reforma energética, no queda otra que consultar a los ciudadanos de la mejor manera que se pueda. Y es que la consulta sobre la reforma energética se va a hacer. En todo caso, lo que está por verse es cuál será su influencia dado que no es jurídicamente vinculante y su peso político y moral dependerá de la calidad del proceso y la cantidad de los votantes, evaluados según las condiciones en que se lleve a cabo la consulta.

Pero para tener una perspectiva adecuada del ejercicio se requiere, antes que otra cosa, tener claridad acerca del para qué de la consulta, pues no necesariamente sus promotores buscan lo mismo. Si bien sus promotores principales coinciden en defender el petróleo, rechazar las iniciativas privatizadoras de Calderón y fortalecer a PEMEX, la divergencia que existe en la línea política para enfrentar al gobierno que se considera ilegítimo y luchar por el poder, como corresponde a cualquier partido político, trae como consecuencia natural que se vea diferente el papel que debe desempeñar el instrumento plebiscitario, sobretodo una vez que éste haya concluido.

Si se piensa que es a través de las instituciones y por la vía democrática como se deben dirimir las discrepancias en el país y pugnar para gobernarlo entonces la consulta debe servir para orientar a los legisladores en las cámaras sobre su actuación, para sumar a sectores de la opinión pública a favor de una posición nacionalista, para poner bajo lupa lo que se haga en el Congreso y para pasar la factura a los partidos que avalen una propuesta contraria a lo expresado en la consulta, de tal suerte que paguen los costos en las elecciones intermedias. Pero de ninguna manera para legitimar pretensiones aventuradas de insurrección.

Por el contrario, si lo que se quiere es fortalecer “el movimiento” para provocar una crisis política y social que desemboque en un cambio de régimen entonces convendría que se dé la imposición para tener un agravio con el cual escalar el conflicto. En esa lógica no se puede aceptar ningún tipo de negociación y se debe trabajar únicamente para pavimentar el rechazo callejero a cualquier propuesta que se presente y exhibir a “los traidores a la patria” que impondrían la reforma antipopular -y si lo hacen en sede alterna pues mejor. El objetivo no pasa por aprobar una reforma energética beneficiosa para el país y que evite la privatización explícita o encubierta. Más bien es al revés: entre más entreguista y antinacional sea lo que se apruebe será más fácil sensibilizar “al pueblo” del atraco y llevar la confrontación a las calles.

En este último caso, la consulta serviría fundamentalmente para negar cualquier elemento de legitimidad a una iniciativa contraria a la opinión ciudadana y una justificación para agudizar la confrontación. Aunque parezca increíble, este es el escenario que acaricia tanto Felipe Calderón como Andrés Manuel López Obrador, pues ambos creen que la polarización les ayuda. Al primero porque pretende convertir la votación del 2009 en plebiscitaria y que la gente se pronuncie por él o por su antagonista y, por lo mismo, sumar a favor de su partido el rechazo social que la dinámica seguida por AMLO durante los últimos dos años le ha traído a él y al PRD. Al segundo porque no le preocupan las urnas de la elección intermedia sino la posibilidad de radicalizar la resistencia civil y poner en jaque al gobierno ilegítimo mediante la movilización.

Mientras los dos protagonistas del 2 de julio del 2006 juegan con fuego en medio de pozos petroleros, el resto del mundo político haría bien en no dejarse secuestrar por los extremos y abrir un cauce democrático para mantener dentro de las instituciones la lucha contra la controvertida reforma energética. Los debates del Senado han servido para sepultar intelectual y políticamente a las iniciativas de Calderón al grado que éste se ha visto forzado a hacer cambios drásticos y recurrir a la franca provocación para tratar de revivirlas. En ese sentido, la consulta puede ser fundamental para darle la puntilla a sus elementos privatizadores y nefastos, pero también para construir una alternativa que fortalezca a PEMEX, ayude al país y resguarde la soberanía energética. Si el debate ha dado consistencia a la oposición a lo propuesto por el Poder Ejecutivo, así como a la generación de una propuesta diferente, la consulta significa la oportunidad para evitar el choque de trenes y proporcionar legitimidad a una ruta de amplios consensos que se construya entre las iniciativas y su simple rechazo.

Para que dicha posibilidad se haga realidad es preciso dotar a la consulta de un elemento crucial: credibilidad. La pregunta debe ser profesional, sin sesgo, técnicamente impecable y avalada por expertos que recojan lo expuesto en los debates. Además, junto con el rechazo a lo que se considera inadmisible, también debe indicar por dónde transitar, qué es lo correcto, lo necesario, lo deseable. En lugar de una posición cerrada e intransigente, el mandato a los legisladores que hagan suya la consulta es de buscar acuerdos con los otros partidos dentro de los márgenes y los ejes establecidos por la opinión ciudadana. Es decir, la consulta marcaría los límites, pero también abriría perspectivas de una reforma posible y benéfica para la nación.

En ese sentido es de celebrarse que el Instituto Electoral del Distrito Federal haya accedido a organizar la consulta, pues eso genera certeza y confianza en el proceso y en sus resultados. También lo es el que diversos gobiernos, estatales y municipales, decidan impulsar la consulta para que sus habitantes sean tomados en cuenta en el Congreso de la Unión en la resolución de un tema por demás trascendente. EL PRD acordó en su pasado Consejo Nacional impulsar la consulta nacional el próximo 27 de julio. Seguramente en los próximos días se sumarán otros partidos, organizaciones sociales, ONG’s, académicos, intelectuales, personalidades, etc. La sorpresa que nos dio el Colegio de Abogados Católicos para impulsar la consulta y promover el voto a favor de las iniciativas de Calderón es una muy buena señal en virtud de que pluraliza la convocatoria. Por supuesto, organizar una consulta en todo el país no es fácil y la disposición del órgano electoral en el DF es la excepción y no la regla. Sin embargo, la consulta va…


De paso…

Creel. Mucho se ha especulado acerca de los motivos que llevaron a la remoción del Coordinador del Grupo Parlamentario del PAN en el Senado. No podía ser de otra manera dadas las formas que se utilizaron y que se pueden sintetizar en el típico y tradicional madruguete que tanto se estilaba en el viejo régimen con el partido oficial. Además, es verdad que Santiago Creel encabezaba por mucho las preferencias electorales en el partido blanquiazul; también lo es que las televisoras no lo quieren, así como su vocación reformista y tendiente a los acuerdos más que a la imposición. Su cabeza rodando expresa que hoy por hoy los ultras de la derecha son los que dominan los ánimos en la residencia oficial de Los Pinos y que no existe la intención de negociar una reforma energética de consenso… Calderón niega ser de derecha y cuestiona a sus adversarios políticos con acritud y rudeza en la prensa española. Provocaciones que demuestran que lo que verdaderamente quiere el titular del Ejecutivo es fortalecer al ala intransigente del PRD. Esa es la forma más fácil para que el partido del sol azteca se desprestigie…Mientras tanto, ese priísta químicamente puro, el tal José Ángel Ávila que por azares del destino está al frente de la Secretaría de Gobierno del Distrito Federal, sigue aplicando la receta porfiriana de mostrar la zanahoria y el garrote a todo aquel diputado que no se alinea en la Asamblea Legislativa. Para él, la política eficaz es la que es capaz de corromper y destruir…

lunes, 9 de junio de 2008

OBAMA

Terminó la contienda por la nominación del candidato demócrata a la presidencia de los Estados Unidos tras una ardua e intensa lucha que captó la atención internacional y que llevó, en un hecho sin precedentes, a treinta seis millones de norteamericanos a las urnas. No fue la emoción de una carrera parejera que se decidiría hasta el último momento lo único que explica la expectación y el interés que dentro y fuera de aquel país se generó durante los últimos seis meses. En eso tuvo mucho que ver el tamaño, carácter, perfil y magnetismo de los protagonistas. El mundo fue testigo de una batalla de Titanes por la historia. El desenlace determinaría si disputaría en serio la presidencia de la nación más poderosa de la tierra una mujer o un afroamericano, siendo que las virtudes de ambos contendientes rebasan por mucho esa condición específica de su naturaleza. Salió victorioso Barack Obama, el senador por Illinois a quien al principio del proceso se le reconocían escasas posibilidades. La también senadora Hillary Clinton peleó hasta el final y aceptó el resultado con su dignidad y elegancia habitual, llamando a sumarse a la campaña del próximo candidato demócrata. Lo que viene no será fácil, pero tiene una trascendencia incuestionable no sólo para el pueblo estadounidense sino para el conjunto de la humanidad: sacar a los republicanos de La Casa Blanca.

La administración de Bush Jr., mantiene sus niveles más bajos de aceptación y los problemas de la economía se le suman a su errática política internacional que además de grajearse la antipatía mundial ha metido a su país en un pantano llamado Irak que está haciendo resurgir el síndrome de Vietnam. Sin embargo, la apuesta demócrata no es basarse en el voto de castigo, pues tampoco es algo mecánico que el cuestionamiento al presidente republicano se traslade a su candidato, el veterano de guerra John McCane. Además, la contienda interna por la candidatura demostró que la fuerza de Obama es su capacidad para seducir, para emocionar, para convencer, para hacer creer. Frente a la consistencia y conocimiento de Hillary Clinton que ante cada problema daba una cátedra doctoral sobre el diagnóstico y la solución, el virtual candidato demócrata se apropió de la bandera del cambio y le dio dimensión de rebelión contra las elites, aunque, y esto es muy importante, sin rencor, con vocación de unidad, inspirando esperanza. Tiene razón Obama cuando dice que haber enfrentado a Hillary lo hizo mejor candidato.

El fenómeno de Obama parece guión de película. Hijo de un hombre negro de Kenia y mujer blanca de Kansas; vive con su mamá en Yakarta y es criado por un padrastro indonesio; regresa a radicar con sus abuelos en Hawai; estudiante sobresaliente de Harvard; trabajador social en suburbios pobres de Chicago; creyente de una iglesia encabezada por un pastor cuyos sermones y declaraciones rayan en la provocación –por eso tuvo que deslindarse recientemente de él-; senador opuesto desde el principio a la aventura bélica de Irak; desde el 3 de enero de este año, cuando ganó sorpresivamente en el caucuses de Iowa, una bola de nieve que está sacudiendo la vida política norteamericana y que tiene a la vista la presidencia más importante del planeta.

El paso que falta no será fácil. Ser candidato afroamericano en un país dominado históricamente por blancos anglosajones es todo un acontecimiento y un reto que si no fuera por la obamanía parecería imposible. Es verdad que desde su independencia los Estados Unidos consagraron los derechos del hombre y las libertades civiles, pero tuvieron que ser las mismas minorías las que las conquistaran en la práctica con luchas memorables. Por desgracia y a pesar de lo anterior, sigue siendo innegable que en amplios sectores sociales perviven resabios racistas que sufren no sólo los miles y miles de inmigrantes que ahí coexisten sino también los que han forjado esa nación desde hace siglos. ¡Qué gran paso sería para ese país cosmopolita, para su convivencia democrática y su integración racial, el triunfo de Barack Obama!

Con una retórica casi poética, sin dejar de tener sentido y contenido, Obama ha llegado al alma de los estadounidenses de todas las clases, razas y credos. La multiplicación de su apoyo ha tenido como detonante la incorporación de miles de jóvenes que no se interesaban en política y ahora se siente su ímpetu irrefrenable que hace milagros y prueba de ello es que ahora es candidato contra todos los pronósticos y tras vencer a una mujer excepcional que parecía destinada a triunfar. Por ello su mensaje se repite en cada esquina: “Sí podemos”.

La primera tarea de Obama es que la inmensa mayoría del amplio respaldo que tuvo Hillary Clinton se quede con él. El impecable discurso de ella del pasado sábado sin duda que ayuda. “ La manera de continuar nuestra lucha ahora –dijo la senadora por Nueva York- de lograr las metas que representamos, es emplear nuestra energía, nuestra pasión, nuestra fuerza, y hacer todo lo que podamos para ayudar a elegir a Barack Obama como el próximo presidente de Estados Unidos. Hoy, al suspender mi campaña, lo felicito por la victoria que ha logrado y la campaña extraordinaria que ha llevado a cabo. Lo endoso y le otorgo mi pleno apoyo”. Respaldo imprescindible si se toma en cuenta la aceptación que Hillary logró entre las mujeres y los latinos. De cualquier manera la reconciliación demócrata no será fácil, pues la contienda entre ambos llegó a ser muy acre y no todos los seguidores serán capaces de olvidar los agravios y elevar la mira. La posibilidad de que ambos hagan fórmula común y se integre le ex primera dama como candidata a la vicepresidencia no se ve fácil, pero tampoco se descarta. Sería una mancuerna de un magnetismo y capacidad indiscutible. El problema para el equipo de Obama es dilucidar si no sería demasiado para los electores la combinación afroamericano-mujer, aunque parece imposible que encuentre a algún varón blanco, anglosajón y cristiano que tenga el conocimiento, la capacidad y la propuesta que ha mostrado la señora Clinton.

Algo importante está pasando en Estados Unidos, algo profundo y enigmático. No es cualquier cosa que un candidato afroamericano esté catalizando la inquietud de cambio y sea capaz de emocionar y darle esperanza a grandes sectores de la sociedad norteamericana. Obama surgió, creció y prevaleció entre los simpatizantes demócratas porque expresa mejor que nadie el sentir de hastío que hoy prevalece frente al stablishment, y porque ha sabido promover una salida innovadora dentro del cauce democrático, llamando al compromiso colectivo e invocando a la unidad y a la reconciliación, a esa crisis de credibilidad y confianza que sufre la clase política tradicional.

No es sólo una revolución de conciencias sino también de formas políticas. Si bien ha tenido grandes y poderosos donantes, más del 90% de los 265 millones de dólares que recaudó son de menos de 200 dólares y muchos de ellos están entre 10 y 20 dolares. Estamos hablando de un ejército de más de 125 mil aportantes. Ese es el efecto de la esperanza, pero también de un manejo de la red sin precedentes que ha horizontalizado la batalla por la presidencia. Esto hace prever que el candidato demócrata se dé el lujo de rechazar los más de 80 millones de dólares de financiamiento público y tener más libertad para la recaudación a diferencia de John McCane que, a pesar de contar con el respaldo de los grandes potentados, no tendrá una base siquiera similar a la que mostró Barack en las primarias demócratas.

Los compromisos de Obama para acabar con los privilegios, poner fin a la ocupación de Irak, promover la paz mediante el diálogo, el entendimiento y el multilateralismo y hacer de Estados Unidos un país sin ciudadanos de segunda hace que la esperanza se traslade al mundo entero. Si alguna elección no nos puede ser indiferente es precisamente la de aquella nación. Por eso, aunque no puedo votar, me permito desde aquí respaldar a Barack Obama. ¡Claro que sí podemos!


De paso…

Consulta. Nada ejemplifica mejor la inmadurez y el anquilosamiento de la clase política que su incapacidad para encontrar salidas institucionales y democráticas a sus divergencias cruciales. La reforma energética puede ser un detonante para un conflicto social que se salga de cauce, que enrarezca y descomponga aún más la vida política del país, preámbulo nefasto de cara a las elecciones intermedias. La consulta es un planteamiento que puede ayudar a mantener el conflicto dentro de la institucionalidad democrática o parte de una ruta para escalarlo. Depende de la sensibilidad y la inteligencia del gobierno federal que sea lo primero y no lo segundo. ¡Estamos perdidos!...Si la sensatez no fuera un bien escaso en la vida política mexicana, entonces podría transitar una propuesta que parece casi de sentido común: háganse con celeridad los cambios legales que permitan la realización del plebiscito a nivel federal, apruébense los consensos de la reforma energética y pregúntese a la ciudadanía en las elecciones del 2009 sobre los disensos…De cualquier manera, la consulta va…El PRD empieza a normalizar su vida institucional y a recuperar la iniciativa política con la gestión de Guadalupe Acosta Naranjo y Marta Dalia Gastelum, a pesar de que cierto presidente estatal que parecía muy serio, responsable e institucional se fue a argumentar al TEPJF y a los medios de comunicación que eso no era cierto, que todo estaba del nabo y que no se dejaran engañar por consensos y unanimidades, que su promoción, apoyo y aval al nuevo secretario de Finanzas que es de su corriente y que tuvo que ser propuesto por el presidente en funciones y votado por la mayoría de Nueva Izquierda-ADN en el Consejo Nacional no significaba reconocer nada ni a nadie. No pos sí…Y mientras tanto se acerca la hora de la verdad para la Comisión Nacional de Garantías y Vigilancia que tendrá que decir al país entero quién ganó la elección del 16 de marzo. ¿Será por eso que por ahí se ha visto colgado en sus paredes a ese santo laico conocido como El Gran Kalimán? Bien harían todos en el PRD a seguir ese ejemplo, pues como nunca se necesita hacer acopio serenidad y paciencia…

lunes, 2 de junio de 2008

GOLPISMO EN LA ALDF

Una extraña intromisión estuvo a punto de hacer naufragar las reformas al Código Electoral y a la Ley Orgánica de la Asamblea Legislativa en el Distrito Federal que, como resultado de los recientes cambios al Estatuto de Gobierno que aprobó el Congreso de la Unión y de las resoluciones que al respecto acaba de emitir la Suprema Corte de Justicia de la Nación, se tenían que aprobar en el órgano legislativo de la capital del país. Alrededor de las 14 hrs., del pasado jueves 29 de mayo, se decretó abruptamente un receso de la Comisión de Normatividad, Estudios y Prácticas Parlamentarias debido a la necesaria valoración de una propuesta enviada por singular conducto a Germán Martínez, Presidente Nacional del PAN. El dirigente blanquiazul informó a sus diputados de las gestiones de un político veracruzano de mala fama y que responde al nombre de Miguel Ángel Yunes, el que montó el show de trasvestis al ingeniero Cárdenas durante su campaña en 1994, director del ISSSTE, promotor de la ley del mismo nombre y operador del primer círculo de Elba Esther Gordillo. El alfil de la poderosa líder sindical del magisterio se ostentó como paloma mensajera del jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard, con una propuesta para detener el proceso parlamentario: repartir los nuevos consejeros electorales del IEDF en una negociación bilateral del gobierno de la ciudad con el PAN. Sobra decir que el Grupo Parlamentario panista no aceptó el ofrecimiento.

Ese fue el último de muchos intentos desesperados para parar las reformas propuestas. A últimas fechas, el recinto de Donceles se ha vuelto un auténtico mercado persa en el que sin recato alguno se busca, desde el oficialismo, hacerse de la conciencia de los legisladores a cambio de la entrega de recursos públicos sin ningún tipo de control. No lo pudo expresar mejor el diputado Agustín Guerrero al referirse a la verdadera fuerza de su todavía bloque minoritario: “Tenemos chequera” (El Centro, 30 de mayo de 2008).

Pero lo que estamos viendo sobrepasa ya el largo y tedioso draft legislativo de la fracción perredista, cuya permanente actividad ha hecho que nadie se sorprenda de la creciente, desinhibida y exultante puja gubernamental por hacerse, uno a uno, de más adeptos. Sin restarle importancia a la corrupción de diputados, la gravedad de lo que se ha vivido en las últimas semanas estriba en que el Poder Ejecutivo decidió lanzar una cruzada para someter a otro Poder que debe ser su equilibrio y contrapeso. Peor aún cuando por ese avieso propósito se interviene en la vida interna de partidos y grupos parlamentarios de oposición. Es verdad que es correcto, legítimo y necesario que cualquier gobierno tenga relación y llegue a acuerdos con la pluralidad política representada en el parlamento y, en ese sentido, nadie puede censurar a la administración capitalina por construir puntos de avenencia con el PAN, el PVEM y el PANAL, aunque lo ideal sería que lo hiciera a la luz del día y sin esconderse. Sin embargo, lo que no es admisible es que se alienten e instrumenten actos golpistas para que se decida en el edificio del Ayuntamiento lo que corresponde resolverse en el recinto de Donceles.

Se perdió toda proporción y no quedan restos del más tenue sentido de los límites. Lo que privó fue el descaro, la versión más rústica del machismo político que no ve más perspectiva para salvaguardar su honra que imponerse sin importar las formas ni el precio. Parece increíble que el gobierno de la capital en la situación tan complicada que de por sí vive tras el 2006, en medio de la crisis más grave en la historia del partido en el gobierno y de cara a la polarización nacional por la reforma energética juegue su capital a un albur de ajuste de cuentas interno y que los acuerdos con El Niño Verde y La Maestra tengan como centro el control legislativo a partir de golpes bajos y puñaladas traperas.

De un día para otro el coordinador del PANAL – conocida franquicia gordillista-, Xiuh Tenorio, se desdice de los acuerdos tomados con los demás Grupos Parlamentarios y decide hacer bloque con Agustín Guerrero. Pero lo que no guardó ningún recato fue el derrocamiento del coordinador de la Coalición Socialdemócrata, José Carlos Díaz Cuervo. Paradójicamente le tocó al diputado Alejandro Ramírez que había sido destituido de la presidencia del Partido Convergencia en el DF, según él mismo denunció, por intervención del GDF como represalia por sus acuerdos con Nueva Izquierda encabezar el acto golpista y ser nombrado sustituto con el apoyo de los pvemistas. A confesión de parte, relevo de pruebas. Por eso se debe reconocer nuevamente la franqueza del diputado Guerrero. El conocido legislador manifestó desde la tribuna su rechazó a las modificaciones y dirigiéndose al presidente de la ALDF, Víctor Hugo Círigo, dijo: “Ya te costó dos votos de coordinadores en la Comisión de Gobierno. Ya te costó el cambio de un coordinador en un Grupo Parlamentario” (Versión estenográfica del Diario de Debates, ALDF, 29 de mayo de 2008).

La salvaje ofensiva de desinformación de la prensa oficialista y la respuesta airada de altos funcionarios a la aprobación de los cambios que la ALDF estaba obligada a hacer, pero que pretendían posponerlos para que no se instrumentaran en la elección intermedia del 2009, ponen al descubierto el grado de intervencionismo que tuvo el gobierno durante todo el proceso. Actitud inexplicable porque los “controvertidos” cambios al Estatuto de Gobierno fueron avalados por votación unánime de la Asamblea Legislativa antes de enviarlos al Congreso de la Unión y responden a la agenda democrática que impulsó el PRD a nivel federal. Se pierde de vista que si bien la congruencia tiene costos, son mayores los beneficios de la confianza y la autoridad moral que da ofrecer como gobierno lo que se exige como oposición.

Es falso que la división de poderes sea ineficaz y debilite a los gobiernos. La ALDF es buen ejemplo de ello. Esta legislatura es por mucho la más productiva, cuantitativa y cualitativamente, de la historia reciente de la capital del país. No en balde pudo descongelar la Ley de Sociedades en Convivencia y despenalizar el aborto, en lo que han sido las principales derrotas ideológicas de la derecha desde que Calderón asumió el cargo. La gran lucha por la democratización del país es precisamente desconcentrar el poder. Es verdad que vivimos el feudalismo de los señores gobernadores (casi) todopoderosos. Pero la izquierda tiene muchas razones para que sus gobiernos sean diferentes. Que los consejos electorales de los estados estén controlados por los titulares del Poder Ejecutivo no es razón para que en la entidad perredista más importante ocurra lo mismo. En todo caso, es al revés.


De paso…

Consulta. Donde sí le fue bien a Marcelo Ebrard fue en el Senado. La propuesta de consultar a la ciudadanía parece incontrovertible tras las primeras sesiones del debate y con el conocimiento del apoyo social que según diversas mediciones tiene ese mecanismo. El PRD hizo lo correcto al aprobar en su Consejo Nacional el impulso a la consulta en todo el país…Pero ese no fue el único acierto de la reunión del máximo órgano de dirección perredista. Se elaborará una iniciativa alternativa en materia petrolera a la propuesta privatizadora de Calderón y se buscará hacer la más amplia alianza posible entorno a ella…También lo fue el nombrar como secretario de finanzas a Rigoberto Ávila, hombre honesto que genera confianza en propios y extraños y que cuenta con una trayectoria incuestionable de hombre de izquierda. Esperemos que su cercanía con Alejandro Encinas coadyuve a los equilibrios, relaje la lucha interna, ayude a la gobernabilidad y normalice la vida institucional…De por sí, que todos hayan acudido ya era muy buena noticia…Tiene razón el ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas y debemos congratularnos de la amplitud que existe entre los que coincidimos en defender al petróleo. Por lo mismo, la coordinación de ese gran movimiento social diverso debe ser horizontal y no es aceptable ni deseable que alguien pretenda acapararlo. La lucha por defender la soberanía energética de México no tiene copy right…